El C-Cactus combina una mecánica HDi de 70 CV, dotada de filtro de partículas, con un motor eléctrico que aporta 30 CV de potencia. Consume 3,4 litros y sólo emite 78 g/Km de CO2, en la ciudad, el modo ZEV (Zero Emission Vehicle) permite un uso sólo eléctrico, rodando así en absoluto silencio. Si precisa más aceleración, los motores actuan combinados.
Se basa en el C4 y se ha racionalizado mucho su concepto, al emplear la mitad de piezas que en otros coches y agrupar bastantes funciones en un solo mando.
Todo éste minimalismo no le impide que lleve un equipamiento muy completo o en éste caso detalles algo curiosos, como la decoración floral o una llave de contacto que por cierto es un MP3.
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